Antes de exponer mi entrada, creo que es conveniente hacer una pequeña descripción sobre que se considera hardware y software, que, aunque puedan considerarse conceptos básicos del lenguaje informático, no siempre se tiene claro su significado. En primer lugar, hablamos de hardware al referirnos a la parte física, visible y tangible de un ordenador, la parte dura, de ahí la terminación “hard”. En cambio el software está considerado como la parte lógica o la parte blanda “soft”, es decir, el juego de instrucciones que está compuesto por sistemas operativos y programas que controlan el hardware. Ambos elementos son importantes y relevantes porque tienen que complementarse para poder ejecutarse, ya que sin el hardware para el que programar difícilmente podríamos hablar de software para ejecutar en él y viceversa.
Pero a pesar de la importancia de ambos para la evolución informática tal y como la conocemos hoy en día, fue sin duda el software el que jugó un papel transcendental en el desarrollo y la estandarización de la industria.
UN ERROR DE MILES DE MILLONES
En el año 1980 Bill Gates con apenas 25 años, en representación de la empresa aún desconocida, Microsoft, se reunía con IBM una de las multinacionales que mantenía por aquel entonces el monopolio del mercado informático y de dispositivos electrónicos, para ofrecerles un sistema operativo destinado a la primera computadora personal que dicha marca pretendía sacar al mercado, ya que esta entonces su uso se limitaba al entorno industrial.
Debido a la nueva demanda que se estaba creando de equipos destinados al uso personal, por culpa en parte de la empresa Apple que estaba obteniendo un rápido auge gracias a esta clase de productos. Bill Gates les ofrecía un programa que superaría el anterior, capaz de adaptarse perfectamente a las necesidades de su nuevo ordenador, el llamado MS-DOS, pero a cambio sólo pedía como condición mantener la licencia de dicho sistema, a lo que IBM no puso objeción ninguna y cedió argumentando que "los beneficios estaban en los ordenadores, y no en el software”. Esta afirmación marcaría uno de los mayores errores en negociaciones de empresas que se haya dado en la historia.
EL SOFTWARE QUE CAMBIÓ LA IDUSTRIA INFORMÁTICA
Un año más tarde cuando IBM lanzó al mercado dicho PC de uso personal, tuvo una gran acogida e incluso se superaron las expectativas de ventas. Poco después, se abriría un amplio mercado en el comercio de computadoras y surgirían multitud de ordenadores con características similares a precios más competitivos, pero que también llevaban incorporado el sistema operativo MS-DOS, por lo que Bill Gates se enriquecía vendiendo la licencia a todas aquellas empresas que demandaban su producto consideraban que era un éxito seguro. Mientras tanto, a IBM se vio obligado a compartir su éxito por no haber comprado la licencia.
Todo ello propicio la estandarización de los ordenadores a nivel doméstico que, hasta ese momento, eran totalmente diferentes e incompatibles. Cada empresa tenía su propio modelo y necesita un sistema operativo determinado, por lo que cualquier actualización o mejora limitaba la vida útil del mismo.
Pero con la llegada del nuevo modelo de software de IBM, muchas empresas debido al éxito que está obteniendo se ven casi obligadas a imitarlo y además a utilizar el mismo sistema operativo, por lo que se acabarán las incompatibilidades.
Lo cierto es que la industria necesitaba un estándar para poder desarrollarse, por lo que gracias a dicho estándar la mayoría de nosotros tenemos un PC en nuestros hogares.
LO IMPORTANTE ESTÁ EN EL INTERIOR
Finalmente, con la evolución de la técnica, los costos del hardware disminuyeron de forma continuada, mientras que los costes en el software se fueron incrementando, llegando a transformarse en la parte más voluminosa de los gastos en tecnología informática. El hardware, ya no era lo más importante y el software ocupó su lugar.
Prueba de ello son la multitud de aparatos que requieren una actualización y renovación permanente de su software para completarse y seguir evolucionando correctamente. Como ocurre con los ordenadores y la telefonía móvil que año tras año saca las nuevas versiones de sus modelos basados más en la funcionalidad que en los cambios de diseño apenas apreciables.
Otro caso podría ser el de las video consolas, en el que los usuarios realizan un desembolso inicial que deben aumentar para acceder a los nuevos contenidos, videojuegos o utensilios periféricos.
Finalmente, a pesar de no pertenecer al mismo sector, los automóviles están considerados como uno de los mayores gastos ya que suponen una elevada inversión inicial en la adquisición del mismo, pero también conllevan una serie de gastos implícitos necesarios, como pueden ser el seguro, revisiones, mantenimiento y, especialmente, la gasolina.
Solo añadir un detalle importante en la evolución del software, y aprovechando que tu artículo termina con la foto de un iPhone, que son las aplicaciones y los sistemas operativos para móviles, una revolución que estamos viviendo en primera persona y que se ha convertido con la aparición de iOS, Android y la nueva versión de Windows 8 en un nuevo mercado que nos da pistas de hacia donde va a ir el mundo de la informática personal hacia el futuro. Ya lo decía el difunto Jobs, "la era post-PC ha comenzado" ;)
ResponderEliminarEs curioso el paralelismo entre los móviles que menciona Zuri: En el caso del iPhone, es casi tan importante el software como el hardware, Apple no comparte sus licencias, ni quiere licencias ajenas para su sistema operativo. Sin embargo, tanto Google como Microsoft están basando su éxito (más Google que Microsoft) en licenciar su software a distintos fabricantes.
ResponderEliminar¿ cuál os parece mejor iniciativa empresarial, no compartir licencias, o licenciar a distintos fabricantes?
ResponderEliminarPues por poner un ejemplo, podríamos decir que la segunda le está saliendo bastante bien a Google en el terreno de los móviles, licenciando Android a la gran mayoría de fabricantes de teléfonos, mientras que Apple solo cubre sus propios modelos. Habría que ver hasta qué punto es mejor o peor en el aspecto económico, ya que Apple con un solo terminal cubre un importante espectro del mercado (gigantesco en el caso de los tablets).
ResponderEliminarYo creo que siempre es mucho más positivo licenciar a varios fabricantes diferentes porque así tenemos más libertad de elección. Claro que esto lo escribo en un ordenador en el que aparece una manzana, así que mi pensamiento y mi trabajo no parecen ser muy coherentes ;)
Me ocurre lo mismo Zuri, desde un punto de vista de usuario veo mejor el licenciar a varios fabricantes, ya que hay más compatibilidad. Pero como tú, lo escribo desde una manzana.
ResponderEliminarYo también pienso que para el usuario es mejor licenciar a varios fabricantes y que haya una mayor libertad de elección, pero probablemente las empresas, cuando tienen un monopolio, no piensan de la misma manera.
ResponderEliminarEn general, licenciar siempre es más exitoso que no hacerlo, ya que de esa manera se puede cubrir un mayor espectro, alcanzando mayores cuotas de mercado. Uno los factores que influyeron en la imposición del VHS frente al Beta, fue que los costes de licencias que exigía Sony (desarrollador del Beta) eran mucho mayores que los de JVC para el VHS.
ResponderEliminarPor otro lado, uno de los argumentos que usa Apple, es el que manteniendo el monopolio en hardware y software se asegura que ambos son totalmente compatibles y optimizados... y de esa manera controlar la obsolescencia tecnológica y forzar a que los usuarios siempre quieran el último modelo.
Licenciar siempre... salvo que seas un genio del marketing.
Por mi parte prefiero poder elegir y que el software no está restringido a una marca. Pero también entiendo que no todos los usuarios son iguales.
ResponderEliminarNo sé si me equivoco mucho al interpretar la estrategia de Apple como alguien que quiere alcanzar usuarios a los que eso le da igual, de alguna manera Apple quiere, y lo ha conseguido, convertir los ordenadores, tablets, etc. en un electrodoméstico. En parte ya lo dice su publicidad: encender y listo. Siempre hay debates sobre aspectos de este tipo, sobre si el ipad es multitarea… pero muchos usuarios quieren usar su Ipad o su portátil como quien usa la lavadora o la nevera, no les interesa como funciona y no quieren problemas.
Además, como señala Clara, hay un interés de Apple por controlar la calidad de sus productos. Ya hemos visto en la película la obsesión de Jobs por la calidad. Al controlar de forma exclusiva hardware y software puede trabajar de acuerdo con los estándares que se han marcado.