En las películas ‘Piratas de Silicon
Valley’ y ‘La red social’ encontramos un
protagonista común. Este no es otro que el propio Silicon Valley y las
características que lo han convertido en centro de innovación y vivero de
empresas tecnológicas. El conflicto personal que se aborada en ‘La red social’
además pone de relieve las dos maneras de entender una empresa y el nuevo paradigma
que surge en California.
¿Por qué Silicon Valley? En esta zona de
la bahía de San Francisco, un territorio pequeño, se concentran varios
factores: conocimiento, mano de obra y capital.
Las potentes universidades y centros de
investigación jugaron un papel importante a la hora de concentrar el
conocimiento y atraer talento. Esto propició una cultura de la innovación.
El capital de riesgo también ha sido un
factor esencial y característico de Silicon Valley que ha sido una de la
principales vías de financiación de start-ups, tal y como vemos reflejado en la
película. Precisamente fue el éxito de Apple con su salida a bolsa en 1980 y lo
grandes beneficios que recogió el capital de riesgo que había invertido en
ellos, lo que aumentó este tipo de financiación para otras empresas.
En la película se reflejan las dos
concepciones de empresa. Por un lado, una más tradicional que busca obtener
beneficios para crecer (vía publicidad en este caso) y otra, más propia de las
start-ups, que busca atraer usuarios antes de pensar el modelo de negocio. La
misma situación se vive con otras grandes empresas como Twitter, con la
diferencia de que Facebook si ha encontrado el modo de monetizar su éxito.
La reciente compra de Instagram (1.000
millones de dólares) por Facebook es un ejemplo de inversiones de capital de
riesgo en una empresa valorada por los usuarios, no por su capacidad para dar
beneficios. La pregunta que muchos se hacen es si estamos ante una nueva
burbuja de internet y cuando explotará.
Lo de que estamos ante la segunda burbuja de Internet estaba en boca de todos, y es precisamente donde hay que ubicar la repentina y oportuna compra de Instagram, que muchos han querido ver como un intento casi desesperado de Facebook de demostrar que no hay una burbuja, sino más bien todo lo contrario. Sin embargo, casi más allá de la burbuja de Internet yo creo que la actual burbuja es la de las aplicaciones para móvil, un mercado que ha crecido exponencialmente, pero que me temo que va a llegar a un punto en el que todo estalle, ya que veo realmente complicado el que existan tantos cientos de miles de aplicaciones, la mayoría muy similares o de muy baja calidad. Una moda que parece destinada a un inevitable reajuste.
ResponderEliminarEn cualquier caso, una cosa que aparece en la película y que me resultó bastante interesante, es ese momento en el que hablan con Sean Parker, el egocéntrico creador de Napster (interpretado por Justin Timberlake) y mientras le reprochan que no ha hecho nada especialmente relevante, éste les contesta animándoles a abrir una tienda de discos. En realidad refleja claramente como Internet ha cambiado algunas industrias como la musical. Napster, que ahora ha pasado a formar parte de Rhapsody (un servicio de música en Streaming, similar al cada vez más popular Spotify, del que Paker posee acciones, al igual que de Facebook), y que cambió para siempre la visión que tenemos de la música como industria hasta la enorme crisis actual, especialmente en España.
Continuando al hilo de lo comentado por Zuri, a mi también me llamó la atención ese momento de la cinta en que le reprochan a Sean Parker no haber creado nada realmente relevante.
ResponderEliminarMe interesó porque, a su vez, el propio Facebook se creó con una intención mucho más inocente de lo que realmente fue a posteriori, ya que como bien refleja la película en un primer momento se trataba de poder seguir lo que hacían otras personas de la propia universidad. No fue intencionadamente un negocio ni una idea especialmente elaborada. Fue su sorprendente y fulgurante éxito lo que disparó sus posibilidades.
Además, Napster fue el primer paso para la existencia de Spotify y otros programas, de pago, a la par que permitió el intercambio de archivos entre usuarios de cualquier parte del mundo.
Internet ha cambiado por completo el mercado de la música, al igual que también lo está haciendo con el cine y podemos decidir unirnos al progreso o empeñarnos en ponernos en contra de él, lo que solamente nos produciría dolores de cabeza.
Recuerdo el anquilosado y absurdo discurso del presidente de la Academia de cine español, Enrique González Macho, en la pasada ceremonia de los premios Goya en la que arremetía contra Internet sin hacer diferencia entre las páginas que permiten intercambio de archivos, las que se lucran con publicidad del trabajo ajeno y aquellas en las que los usuarios acceden a sus contenidos previo pago y que distan por completo de la piratería. Enrique dijo que, hoy por hoy, Internet no es el presente y prácticamente orquestó una caza de brujas contra las nuevas tecnologías porque perjudican al cine.
En lugar de buscar opciones alternativas, de crear nuevos canales de comunicación y posibilidades para que los usuarios puedan disfrutar del cine de diferentes maneras, especialmente teniendo en cuenta la abundante cantidad de títulos que nunca llegan a España o no, al menos, a la mayor parte del país, de esos otros títulos que no llegan a estrenarse por falta de apoyo y de dinero a pesar de haberse producido, y de esos otros que sólo permanecen una o dos semanas en alguna pequeña sala de cine y desaparecen de la cartelera con rapidez sin darte la oportunidad de haberlos visionado, se centró en considerar el progreso, el futuro y la tecnología como un enemigo a batir, sin percatarse que esa falta de miras, ese egoísmo y esa lucha siempre va a volverse en su contra.
La verdad, Ruben, es que el discurso de González Macho fue decepcionante. Supongo que se daran cuenta del cambio de modelo cuando sea demasiado tarde.
ResponderEliminarSobre Napster y el papel tan importante que ya habéis destacado vosotros, solo apuntar la relación del P2P con una manera de entender la nueva sociedad gracias a la tecnología. Os paso un enlace a la wiki de la P2P fundation que me parece muy interesante. Como señalan ellos mismos, esta tecnología tiene el potencial para un cambio y un fortalecimiento de la participación, que afecta al pensamiento y a la sociedad en su conjunto. En la wiki hacen un seguimiento de ese impacto. (que por cierto, también afecta al concepto de periodismo)
Os dejo el link: http://p2pfoundation.net/The_Foundation_for_P2P_Alternatives
Y aunque me salga un poco del tema, pero relacionado, os paso un artículo sobre el posperiodismo a través del cual descubrí esa fundación, y que se fundamenta en el concepto de red abierta. A ver si os gusta.
http://blogs.20minutos.es/codigo-abierto/2012/04/27/un-manifiesto-posperiodistico/
Un saludo
Es evidente que la explosión de la burbuja inmobiliaria, que hemos sufrido en España en los últimos años, ha puesto de manifiesto el peligro que conlleva la especulación desmesurada en mercados emergentes y sobre la economía global. Sin embargo, en el caso de Internet hablamos de un nuevo medio de posibilidades ilimitadas que se ha convertido en un fenómeno sin precedentes.
ResponderEliminarSólo debemos echar un vistazo a la evolución de la penetración de Internet en los hogares, el incremento del uso de smartphones con acceso permanente a la red o en el aumento exponencial del número de horas que los usuarios pasamos cada día en la red para realizar multitud de acciones cotidianas.
Es decir, casos como el de Instagram, en el que Facebook ha pagado por el valor potencial de la empresa en lugar de estimar el coste real actual, son un claro ejemplo de la toma de conciencia que las empresas e inversores están tomando al ver la evolución imparable de Internet. Esta tendencia no sólo se da en empresas directamente relacionadas con las nuevas tecnologías e Internet, sino que los efectos han llegado a todos los sectores revolucionando los modelos de negocio convencionales y abriendo un nuevo horizonte donde la imaginación es el único límite que impide la puesta en marcha de cualquier proyecto.
Siguiendo el hilo comenzado por Zuri, Napster democratizó el mundo de la música. Antes, los músicos tenían una gran dependencia de las discográficas para llegar al gran público y conseguir público para sus conciertos (que es donde siempre ha estado el dinero para los grupos). Pero con el intercambio de música, empezó a ser mucho más sencillo conseguir canciones (no discos) de grupos que las discográficas no querían que conociéramos.
ResponderEliminarMySpace cogió el relevo orientándose a la música y contando con el beneplácito de las discográficas, pero hoy día, ha quedado fagocitada por Facebook, y quizás sustituida por Soundspace combinada con otras redes sociales.
Pero lo más importante, es que cualquier chaval con una guitarra, un teclado y un ordenador puede grabar un disco de calidad aceptable en casa, colgarlo en la red y buscar la gran oportunidad: tenemos el caso de Arctic Monkeys, o el de James Blake, dominando listas de éxitos.
Las nuevas tecnologías están cambiando la industria, pero el gran problema es que lo hacen a una velocidad muy rápida, lo que hace que los dueños de los mercados no estén preparados. A parte de la industria musical, como ya habéis dicho, el cambio en el resto de tecnologías es brutal.El otro día vi la película con amigos, y aproveche para abrir debate. Entre otras cosas hablamos de como la tecnología va a cambiar, no sólo la industria, sino también la sociedad. Hace años la televisión irrumpió. Fue brutal, no sólo en la industria, sino en la sociedad, al igual que Internet hoy en día. Pero la tele tuvo su trono a salvo durante varias décadas, lo que hacía más fácil acostumbrarse a los nuevos cambios y hace que la industria este más controlada. Con la única diferencia de la velocidad de cambio, Internet y las TIC es lo mismo. Al igual que en los hogares se le abrió un hueco a ese aparato en lo salones, llegando luego incluso a más de un televisor en la casa. Internet esta creando un sinfín de posibilidades. Lo que llegamos a pensar en el debate posterior a la película es que no es nada descabellado ver como las nuevas tecnologías crean un nuevos modos de vida, como por ejemplo, ¿quien tendrá discos en casa?, y a su vez, ¿para que un separador o estantería de estos?, lo tendremos en el ordenador, y así, podemos seguir por las películas, libros etc... Puede que con una casa de apenas 50 metros cuadrados una familia de 5 personas viva con el espacio suficiente ( hay quienes hemos vivido así sin tanta tecnología).
ResponderEliminarOtro problema, más centrado con lo que habéis hablado es la dificultad conque se encuentran las industrias para controlar y dirigir esos nuevos cambios. Por lo que vemos no se quieren subir al carro de la tecnología, yo creo que lo harán cuando ellos estén a la cabeza de esos cambios, que no será otra cosa que comprar lo que ahora detestan. ¿Cuánto tardaran las discográficas en repartir más los beneficios con los músicos ?, y ¿Cuánto tardaran en aplicar bajo su empresa lo que ahora piden prohibir?
Sinceramente, lo que más me fascina de la película es la traición de Mark Zuckerberg a su colega Eduardo Saverin, sin el que nunca podría haber hecho realidad Facebook, pues Mark no tenía el capital para invertir en los inicios. Queda claro que el dinero y el poder pueden con todo, la amistad, la conciencia, el honor… todo vale si me hace rico.
ResponderEliminarCuando Facebook vendió una parte de su capital a una firma de capital de riesgo (venture capital) todos creyeron que la venta fue un éxito, y lo fue para todos, excepto para Eduardo Saverin, aunque de esto se enteró más tarde. Con la venta, Saverin incrementó su participación de 30 a 34.4 por ciento del nuevo Facebook, al mismo tiempo que Zuckerberg reducía su participación de 70 por ciento a 60 por ciento, mientras que el resto de las acciones quedaron distribuidas entre los nuevos socios. Saverin estaba satisfecho con el arreglo y cuando le presentaron los contratos para sellar el acuerdo, los firmó sin ningún problema.
Pero, como dicen las abuelas, hay que tener mucho cuidado con lo que se firma y, algunas veces, ese consejo puede valer miles de millones de dólares. En la siguiente venta de acciones de Facebook, de acuerdo con las reglas establecidas en el contrato que Saverin había firmado alegremente, las acciones que se vendieron fueron precisamente la de él. El arreglo contractual firmado por Saverin implicaba una disminución radical de su participación en la empresa que había ayudado a fundar, y, en consecuencia, su patrimonio. Ahora Saverin sería dueño de sólo el 0.03 por ciento de las acciones y ya no tendría ninguna responsabilidad operativa en la empresa. Saverin, al darse cuenta de la trampa en la que había caído, reconoce su equívoco cuando dice en la película, “Cometí un error: pensé que los abogados de la compañía eran los míos.”
Saverin demandó a Zuckerberg y a Facebook por 600 millones de dólares. El proceso se arregló fuera de corte y Saverin logró obtener una compensación en efectivo (por un monto desconocido, probablemente de muchos millones de dólares), que le devolvieran un porcentaje de las acciones de la compañía y que su nombre fuera restituido en la lista de fundadores de Facebook. El acuerdo establece que Saverin no puede hablar de Facebook por el resto de su vida, aunque realmente no creo que eso ya le importe.
Probablemente hayamos presenciado una película, que muestra en paralelo nuestra propia realidad y que será documento histórico en un futuro. Se construye así un relato muy denso, pero también divertido y ligero, gracias al cual nos convertimos en testigos privilegiados de uno de los acontecimientos que han cambiado las relaciones personales en este siglo. Una historia que se narra paralelamente a través de tres momentos temporales. Gracias a ella, el espectador es consciente de cómo se fue construyendo Facebook, también nos explican los difíciles encontronazos legales que tuvieron lugar entre Zuckerberg y sus antiguos socios. Zuckerberg, podría ser una persona con dificultades dentro del ámbito social, sobretodo en la interacción con los demás, que, paradójicamente, inventa una herramienta para la comunicación entre personas. Un supergenio de la informática y de internet. Hasta ahí la película, pero volviendo la vista a lo que hoy es Facebook, encontramos que se trata de un auténtico fenómeno social que no para de crecer. Argumentos existen para una segunda parte y es que el mes pasado saltó la noticia, otro paso más en la escala, Facebook ya tiene fecha para el inicio de su oferta pública de venta: el 18 de mayo. La decisión fue anunciada por «The Wall Street Journal», quien tuvo acceso a fuentes cercanas a la red social. Este diario también desveló que el equipo directivo de Facebook iniciará un tour de entrevistas y reuniones con inversores de Wall Street para garantizar su interés en la empresa. El fundador y director ejecutivo de Facebook, Marc Zuckerberg, participará en algunas de esas reuniones.
ResponderEliminarEl pasado 1 de febrero, Facebook presentó ante la Comisión de Valores de Estados Unidos la documentación necesaria para comenzar su oferta pública de venta. En ese documento conocimos detalles sobre la compañía como que con esta operación la red social buscará recaudar 5.000 millones de dólares. De conseguirlo, se convertiría en una de las operaciones más importantes del sector, superando a la de otros gigantes como Google.
Facebook ha estado trabajando en los últimos meses para ganarse la confianza de sus potenciales inversores. Y continúa creciendo con la compra de la aplicación Instagram por 1.000 millones de dólares, su mayor adquisición hasta el momento; además, un acuerdo con Microsoft para hacerse con parte de su portafolio de patentes.
Gracias a su popularidad −tiene cerca de 900 millones de usuarios activos−, Facebook ha conseguido mantener una posición sólida en el mercado de las empresas tecnológicas, con ingresos en el último año estimados en más de 4.000 millones de dólares y beneficios por valor de 1.000 millones de dólares en 2011.
Como vemos, por encima de la ficción, encontramos un hecho muy patente en esta sociedad, y es que, como dije antes, esta historia parece que por el paso que lleva, bien podría convertirse en una trilogía.