Bill Gates, el presidente de Microsoft, es probablemente, más conocido que muchos políticos y estrellas del cine. Gates es además el segundo hombre más rico del mundo, posee unos 100 billones de dólares.
Pero, pese a su riqueza, Bill Gates atraviesa una situación delicada. Su imagen pública es cada vez más desfavorable. Atrás han quedado los años en que era visto como un niño prodigio, de intelecto brillante y aire inofensivo.
Y es que Gates tiene una personalidad ambiciosa y compleja, su empresa ha sido forjada a su imagen y semejanza; además ha dejado tantas víctimas en su camino que es uno de los hombres más odiados de Estados Unidos.
No en vano, su carisma ha ido decreciendo por momentos. Desde su entorno, encontramos un rechazo importante, de parte de las áreas informáticas más importantes del momento. Yahoo, Facebook e infinidad de grandes empresas han ido abriendo brecha con la empresa del estadounidense, quien ha intentado a golpe de chequera, absorber sus empresas. Sin embargo, William Gates no ha cesado en su empeño de crecer y desarrollar Microsoft, y con ello ha visto como sus esfuerzos se han recompensado con la segunda mayor fortuna del mundo. Pero pese a las grandes envidias de este empresario de altos vuelos, hay que reconocer su gran virtud, la de ser un profundo visionario, un líder capaz de entender dónde y cómo encontrar el negocio, de hecho tratar de monopolizar el mercado del software en la red mundial, es una estrategia, tan atrevida, como inteligente en las formas de hacerlo.
Bajo la dirección de Gates, la misión de Microsoft ha sido avanzar y mejorar la tecnología del software, y hacerla más fácil, más rentable y más agradable, para que la mayoría de la gente pueda usar los ordenadores, llegando a hacer, inversiones de dinero mareantes para el estudio y desarrollo de estas técnicas.
En definitiva, el debate lleva abierto años, Gates, ¿es un tiburón con los negocios, pero a su vez un visionario? o ¿se trata de un líder tirano capaz de cualquier cosa para su enriquecimiento, incluso la monopolización del sector?
Y de esa última valoración, es de donde sale un proceso legal iniciado hace unos años, dónde se acusa a Bill Gates y a su poderosa empresa, de ejercer un monopolio en el mercado de la computación destruyendo a su competencia a través de su increíble poder de mercado.
Un monopolio es una situación de un sector del mercado económico en la que un único vendedor o productor oferta el bien o servicio que la demanda requiere para cubrir sus necesidades en dicho sector, algo que Bill sabía perfectamente y ha intentado llevar a cabo en varias ocasiones, obteniendo el odio de muchos.
Pero todo este cocktail de sucesos en el que hay más victorias que derrotas, ha ido consiguiendo un efecto importante en su índice de popularidad, ganándose una posición mediática que eleva el debate planteado a niveles mundiales, consiguiendo así, una infinidad de relatos, historias y opiniones que apoyan o intentan desprestigiar su imagen. Sin ir más lejos, desde su propia compañía, apareció uno de sus mayores opositores, Paul Allen, quién siendo cofundador de la compañía, le acusó de conspirar en su contra ayudado del actual presidente ejecutivo, Steve Ballmer, los cuales tuvieron una supuesta conversación telefónica, en la que hablaban de la posibilidad de ir poco a poco desacreditando a Allen, en favor de otros accionistas.
Ésta, resulta una de las muchas teorías conspiratorias en las que Bill es el protagonista malo. Otra de las curiosas historias que se han ido extendiendo a través de la red, es la que asegura que el empresario, es el anticristo. Sin duda, una loca afirmación con un argumento que a muchos convence, y es que, partiendo de la base de que el 666 es el número del demonio, hacen la siguiente especulación: el verdadero nombre de Bill Gates es William Henry Gates III (tercero), más conocido como Bill Gates III. Convirtiendo las letras de su nombre al código ASCII, usado por los computadores, se obtendrá lo siguiente:
B I L L G A T E S 3
66 + 73 + 76 + 76 + 71 + 65 + 84 + 69 + 83 + 3 = 666
Historias, conspiraciones, y suposiciones, que han generado un sin fin de controversias sobre este personaje.
Pero, Gates es un modelo cultural debido a su esmero, inteligencia, inquietud y firmeza. En muy pocos años, ha podido hacer lo que para muchos en la mayoría de los casos ha sido imposible, sacar sus ideales adelante, manteniéndolos en su estado. Esto requiere de muchos sacrificios los cuales se ven remunerados de acuerdo a la calidad de profesional, producto y a la aceptación que tenga éste. Sin embargo, en la contra podemos decir que Gates llega a ser tan egoísta, ambicioso y sobre protector, que no justifica la idea de mercado monopolizado, que tenía en mente.
Tal vez se pueda tachar a Bill Gates de "visionario" pues ha visto el negocio cuando lo había y, gracias a eso se ha convertido en el hombre más rico del planeta durante muchos años. Pero discrepo totalmente de esos que lo llaman genio, considero que simplemente es un "ladrón de ideas", efectivamente sabe rentabilizarlas a posteriori, pero me niego a llamar genio a alguien que no tiene respeto alguno por el trabajo ajeno y que se enriquece a costa de las ideas y el trabajo de otras personas. Reconozcámoslo, tanto Gates como Jobs, hubieran sido unos desconocidos si no hubieran encontrado en sus vidas a personas como Paul Allen o Steve Wozniak y,sin embargo, ambos han sido dados de lado por sus "colegas" los "genios" una vez sacaron beneficio económico de sus habilidades. Ellos son los genios realmente, pero el tener conciencia no les dejo hacerse multimillonarios como lo hicieron Gates o Jobs.
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